SUMMARY
Este ejercicio le apunta a la reflexión sobre cómo la memoria fortalece los procesos organizativos y permite lograr una apuesta política participativa donde se reivindican las demandas de las comunidades para construir la paz en su territorio. Para este caso, el diálogo y la construcción participativa de la Agenda Territorial de Paz, como apuesta política, juega un papel fundamental para continuar con la construcción de la memoria colectiva de comunidades rurales victimizadas que están tejiendo paz desde sus propios territorios.