SUMMARY
A finales del Setecientos emergieron algunas teorías para explicar la atracción que supuestamente las mujeres sentían por las frivolidades y las novedades, lo que las convertiría en consumidoras potenciales de estos objetos en mayor medida que los hombres. Sin embargo, prácticamente todos los trabajos que distinguen y caracterizan este "comportamiento femenino" en cuanto al consumo se basan en el análisis de un grupo muy reducido de mujeres: las de clase alta residentes en centros urbanos como París y Londres. Poco se sabe, en cambio, acerca de las pautas de consumo de la mayoría de mujeres, gran parte de las cuales eran pobres y residentes en ámbitos rurales. El principal objetivo de este artículo es hacer una aproximación a esta cuestión en un área concreta, la comarca catalana del Penedés, a partir, principalmente, del análisis de los inventarios post-mortem redactados entre 1670 y 1790. Para ello se presta particular atención a los efectos del régimen jurídico de la familia catalana y de los diversos estadios de la vida de las mujeres en su relación con la posesión y el uso de bienes.