SUMMARY
El creciente envejecimiento poblacional ha traído nuevos retos a la medicina, ya que constituye una etapa donde es más probable que aparezcan enfermedades. Dentro de estas, y ocupando la tercera causa de muerte, se encuentran las cerebrovasculares en particular el ictus isquémico, para el que la edad avanzada constituye un factor de riesgo primordial. Es muy frecuente que, tras un ictus queden secuelas, que conduzcan al deterioro de la capacidad funcional del adulto mayor para desarrollar sus actividades de la vida diaria. Existe una relación directamente proporcional entre la actividad física y el mejoramiento de la capacidad funcional. Es objetivo de este trabajo, presentar un diseño de investigación que tiene el propósito de caracterizar el seguimiento de la evolución del grado de capacidad funcional en adultos mayores a los tres meses de presentar un ictus isquémico. Estudiar la capacidad funcional en el adulto mayor luego de sufrir un ictus isquémico es un tema de gran actualidad e importancia; a partir del ascenso de la población envejecida en el mundo y en particular la provincia de Cienfuegos que demográficamente es una de las más envejecidas de Cuba, así como el aumento de la incidencia del ictus isquémico. La muestra de la investigación, estará constituida por los pacientes mayores de 60 años residentes en el municipio de Rodas, que sufrieron ictus isquémicos.