SUMMARY
Dilucidar la manera de “intervenir” en el escenario de la familia, supone que conocemos su contexto, historia, razones de configuración y en fin, lo que denominamos su procesualidad. Vocablo macabro -a la luz de las exigencias postmodernas-, dado que nos proponemos algo… ¿qué pretendemos conseguir con la “intervención”? ¿Acaso, homogenizar a quienes se han salido del molde exigido por la cultura? Y, ¿a cuál cultura nos referimos… a la que se nos impone porque es el modelo socialmente avalado? O a aquella emergente, cuestionante, subvertora, que habitualmente enarbolan las nuevas generaciones?